viernes, 4 de julio de 2008

Uno - Enrique Santos Discépolo

Uno busca lleno de esperanzas
el camino que los sueños
prometieron a sus ansias...
Sabe que la lucha es cruel
y es mucha pero lucha y se desangra
por la fe que lo empecina.
Uno va arrastrándose entre espinas
y en su afán de dar su amor
sufre y se destroza hasta entender,
que uno se ha quedado sin corazón...
Precio de castigo que uno entrega
por un beso que no llega
o un amor que lo engaño.
Vacío ya de amar y de llorar
tanta traición!...
Si yo tuviera el corazón,
el corazón que di...
Si yo pudiera como ayer
querer sin presentir...
Es posible que a tus ojos
que me gritan su cariño
los cerrara con mis besos...
Sin pensar que eran como esos
otros ojos, los perversos
los que hundieron mi vivir...
Si yo tuviera el corazón,
el mismo que perdí...
Si olvidara a la que ayer
lo destrozo, y pudiera amarte,
me abrazaría a tu ilusión
para llorar tu amor.
Pero Dios te puso en mi camino
sin pensar que ya es muy tarde
y no sabre como quererte...
Déjame que llore
como aquel que sufre en vida
la tortura de llorar su propia muerte.
Pura como sos habrías salvado
mi esperanza con tu amor...
Uno esta tan solo en su dolor,
Uno esta tan ciego en su penar...
Pero un frío cruel
que es peor que el odio,
punto muerto de las almas,
tumba horrenda de mi amor,
maldijo para siempre y me robo
toda ilusión


3 comentarios:

Anónimo dijo...

Me he dado un buen recorrido por los tangos gracias a tus artículos.

"Si yo tuviera el corazón..."

Anjanuca, ¿alguno de tus artículos explica lo que sientes al bailar tango o qué es el tango para ti?

¿Me indicas el "atajo" para llegar a él, pro favor?

Almudena dijo...

Sí señorita, aquí lo tienes:
http://telxinoe.blogspot.com/2008/07/discpolo.html

Es una pequeña entrada que hice el 4 de julio.

Algún día me animaré a poner una foto de mis zapatos de tango, son muy especiales.

Anónimo dijo...

Gracias, Anjanuca.

Un abrazo.