martes, 1 de marzo de 2011

Anclao en París.

Hoy no he ido a trabajar. Es fiesta, el día de las Islas Baleares. Aprovechando que tenía mi casa limpia y ordenada y comida preparada, por la mañana he cogido mi paraguas (había unos nubarrones sospechosos) y mi abrigo y he salido a dar un paseo por la ciudad. A pesar de que el tiempo no ha acompañado para nada, Palma estaba preciosa y con un ambiente familiar que me ha encantado.

Como el día ha ido empeorando, después de comer y de echar media horita de siesta he dedicado la tarde darme el gustazo de leer sin prisas. Tengo empezados dos libros y hoy habría sido un buen día para acabar por lo menos uno de ellos pero no me aguantaba más y he empezado el tercero, "Cazadores de letras" de Ana María Shua.

Podría haber acabado el libro de una sentada, ya sabéis que son microrrelatos por lo que su lectura es más rápida que una novela o un ensayo, pero después de leer unos cuantos he disfrutado tanto que he decido que voy a obligarme a leerle "a sorbitos" para que el gustazo me dure más tiempo. Cuando le termine os haré una entrada con algunos ejemplos para que me podáis entender mejor.

De momento os voy a avanzar uno de estos mini relatos que me ha hecho recordar un tango precioso con una bonita historia:

Parece ser que allá por el 1931 andaba Carlos Gardel en París pasando una mala racha. Harto de penurias, uno de sus músicos escribió una carta al poeta y escritor Enrique Cadícamo que, en aquel tiempo, estaba en Barcelona. En la carta le contaba la situación por la que estaban pasando y le pedía que les escribiese un tango que contase su historia. Cadícamo escribió un tango maravilloso, "Anclao en Paris", y se le envió a Gardel por correo.

El microrrelato de Ana María Shua que me ha traído este tango a la memoria pertenece al libro "La Sueñera" y es este:

" En lugar que a veces es París me tienen secuestrada. En vez de correr hacia la derecha o la izquierda, las calles giran en redondo. Hay un notable exceso de escaleras. Elijo siempre las que van hacia arriba. Sin embargo, por más que subo, no consigo emerger de abajo de la frazada. ¡Es tan duro Paris para los inmigrantes pobres!

Y he aquí el tango:

 

2 comentarios:

Cantares dijo...

:)
El tango es precioso.
No conocía a este cantante
Disfrutá tus paseos, por aquí la ciudad estaba un poco más convulsionada que de costumbre y caminar fué más agotador.
Besos

Almudena dijo...

El tango es relindo, Cantares. Anduve buscando por Youtube una versión bonita y había un vídeo de Gardel pero el sonido era malo, luego encontré uno de Adriana Varela pero parecía que había salido la noche anterior a chupar todo el alcohol de Buenos Aires... y encontré este, tampoco conozco al cantante pero no me desagradó del todo.

Besucos.