lunes, 21 de mayo de 2012

Vergonzoso.

Acabo de pillarme un cabreo de campeonato mundial. Estoy viendo las noticas de RTVE 1. El telediario de toda la vida.

Una de las noticias de hoy es que en España hay un elevado porcentaje de niños que viven en el umbral de la pobreza. Para acompañar los datos de la noticia entrevistan en RTVE a la madre de uno de esos niños. Sentada en el calentito sofá de su salón con muebles modernos y tele de plasma, explica la mamá que el pobrecito hace casi cuatro años que no va de vacaciones y que se siente discriminado por sus amigos porque no puede darse los mismos caprichos que los demás.

Y todo esto seguido por las declaraciones de una subnormal presidenta de no se qué (ni me importa) organización explicando que tenemos que hacer todo lo posible porque estos niños no pierdan el nivel de vida que tenían porque la discriminación puede crearles un trauma difícil de tratar.

Rueg me disculpe la madre de ese pobre niño si le digo que quizás debiera haber enseñado a su hijo que en esta vida no se puede tener todo pero que hay que saber disfrutar de lo que se tiene. Y al niño, por cierto ya crecidito, de niño nada, que si sus amigos le valoran sólo por si va o no de vacaciones o por si sus deportivas son de la marca tal o cual que cambie de amigos y se busque otros mejores porque los que tiene son una auténtica mierda.

Y a la mamá, a la representante de la organización anti-traumas incurables y a los responsables de Radio Televisión Española explicarles que un niño que come tres veces al día, vive en un cómodo piso, tiene en sus manos la oportunidad de ir a un colegio bien equipado, medicinas a su alcance para curar sus enfermedades, agua embotellada para clamar su sed y millones de cosas más además de unos padres que le quieren con locura y no se ven en la necesidad de ponerle a trabajar en una mina… Un niño así no vive en el umbral de la pobreza.

No señores, no, vivir en el umbral de la pobreza es esto:

niño1

Y esto:

niños2

Y esto otro:

 niños3 

Y lo que ustedes han presentado hoy a todo el país es una obscenidad. Deberían ustedes hacerse revisar la moral y los valores a ver si así hay suerte y se les cae la cara de vergüenza. Y revisen también el diccionario que el que tienen, por lo que veo, no es muy fiable.

Y ya que están ,váyanse a la mierda so inmorales. He dicho.

7 comentarios:

Juan Nadie dijo...

Ay, la madre que los parió!. ¿Qué no se pueden ir de vacaciones a las islas Fidji (o como se llamen) y el chaval va a agarrar un trauma? Anda y que les den. A los padres, digo, que bastante desgracia le ha caído al chaval con ellos, conseguirán hacerle un gilipollas sin remedio y de por vida.

Bien dicho: "¡Váyanse a la mierda!"

Cantares dijo...

#$%&/%$#$%#"
No tengo palabras
Besos

Jose Antonio dijo...

También lo he visto y he pensado como tú, pena de manipulación social continua a la que nos someten a todos.

Un abrazo.

El tejón dijo...

¡¡¡VAYANSE A LA MIERDA!!! PERO VAYANSE YA.
AH, ¿QUE NO SE VAN?. TENDRÉMOS QUE ECHARLOS A PALOS,ANJANUCA.
UN BESUCO.

Almudena dijo...

Juan Nadie, pues si me temo que el mayor problema de ciertos niños son ciertos padres.

Cantares yo tengo muchas palabras, pero me temo que me cerrarían el blog.

Senovilla, no sé qué es peor si quien intenta manipular o quien se deja.

Pues eso, paisanuco.

Besucos.

Jose dijo...

Yo no lo vi,pero lo leido en tu blog y es para caersele la cara de verguenza al que se le ocurrio de poner esa noticia.
Que sabran ellos de pobreza...Muy de acuerdo con todas las palabras escritas.Ven un trauma no ir de vacaciones,pero que pensara unos padres cuando no tienen nada de dar de comer a sus hijos o verles morir de hambre...Que sociedad hemos creado...
No tienen verguenza...
Besos

ILONA dijo...

Yo pensé como tú cuando lo ví, Anjanuca. Parece mentira con la que está cayendo que nos intenten manipular de esa manera. Según la versión de los informativos, tanto mis hijos como yo misma hemos tenido infancias de niños pobres. Claro que tenemos una clase de riqueza de la que ellos parecen carecer: la de los principios y la capacidad de análisis, que nos hace indignarnos ante esta pobreza (ésta sí) moral que nos asola.

Besazos.